El jueves 16 de julio de 2020, la Comisión Europea y el ECDC (Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades) pusieron en marcha un plan de acción conjunto sobre Preparación sanitaria de la UE a corto plazo ante brotes de COVID-19 con efecto inmediato.
La Comisión de la UE afirma que "la pandemia de COVID-19, que ha provocado una de las peores crisis de la historia reciente, requiere una vigilancia continua y una acción coordinada. Aunque siguen existiendo muchas incógnitas, se están adquiriendo importantes conocimientos sobre la propia enfermedad, su transmisión, prevención y tratamiento.
La comisión sigue comentando que es "crucial seguir el ritmo de una posible progresión de la pandemia y evitar tener que restablecer medidas estrictas de confinamiento. Estas actividades también deben adaptarse específicamente a grupos vulnerables'
Por primera vez, las personas con obesidad han sido incluidas oficialmente en la categoría de grupos médicamente vulnerables "con problemas de salud subyacentes (por ejemplo, hipertensión, diabetes, obesidad, etc.)". Obsérvese la sección siguiente, que incorpora a las personas con obesidad en el grupo vulnerable.
5.Apoyo a los grupos vulnerables
Algunos grupos son más vulnerables al virus que otros. Se trata de tres categorías: (1) vulnerables desde el punto de vista médico, como los ancianos y las personas con problemas de salud subyacentes (hipertensión, diabetes, etc.), obesidadetc.); Más información en la comunicación completa AQUÍ.
Nuestros colegas de EASO y OPEN EU acogen con satisfacción esta última comunicación de la Comisión Europea.
EASO acoge con gran satisfacción este paso decisivo en un momento en que todos los ámbitos de los sistemas sanitarios se han visto significativamente sobrecargados y, en consecuencia, se ha restado prioridad y escaseado a las personas que padecen obesidad y a los correspondientes servicios de prevención y tratamiento.
Como escribió EASO en el recientemente publicado EASO EU Policy Position Statement on obesity in the context of COVID-19 and building more resilient health systems in the future, Los datos emergentes sugieren que los adultos con obesidad pueden correr el riesgo de padecer una evolución más grave y complicada de la COVID-19, ya que la gravedad de la enfermedad se ve agravada por factores biológicos y sociales asociados a la obesidad.
Esta categorización es un primer paso importante para alinear las pruebas científicas con la elaboración de políticas a escala comunitaria, nacional y regional.
Stella Kyriakides, Comisaria Europea de Salud y Seguridad Alimentariay tuiteó 'Mi mensaje a los Ministros de Sanidad, Ahora es el momento de empezar a reflexionar sobre las lecciones aprendidas del #COVID19 crisis y cómo podemos hacer frente mejor a futuras amenazas sanitarias. Necesitamos y un marco más sólido para la respuesta a futuras crisis. #EPSCO #SFuertesJuntos
¿Qué puede significar esto para las personas que viven con obesidad?
- Esperamos que, al reconocer la UE que las personas con obesidad se encuentran entre los grupos médicamente vulnerables y de alto riesgo, esta comunidad de personas reciba la información correcta que les advierta de los síntomas más graves del COVID-19 y de la progresión de la enfermedad en caso de que contraigan el virus.
- Pedimos formación para todo el personal de primera línea para que puedan entender los retos a los que pueden enfrentarse debido a la complejidad de la Obesidad, y diversas comorbilidades.
- Buscamos la provisión de salud mental y apoyo psicosocial como capullo de los grupos vulnerables.
- Pruebas generalizadas para las personas médicamente vulnerables.
- Necesitamos que las personas con obesidad tengan acceso a programas de tratamiento y gestión de calidad en toda Europa.
- Necesitamos educación para todos sobre la ciencia de la obesidad.
- Necesitamos que los empresarios comprendan y reconozcan que tienen el deber de atender a su personal incluido en la lista de "vulnerables desde el punto de vista médico" y de acomodarse a ellos y a sus necesidades.
Para nosotros, se trata de un gran paso adelante, no sólo para dar prioridad a las personas que padecen obesidad como parte de los grupos vulnerables desde el punto de vista médico en relación con el COVID-19, sino también para trabajar por el reconocimiento de la obesidad como una enfermedad crónica, progresiva y recidivante.
Nuestros colegas de EASO destacan este excelente 'Confiamos en que, como parte de las próximas fases de la "nueva realidad" (Programa EU4Health y Horizonte Europa), la obesidad, como enfermedad crónica recidivante, siga siendo prioritaria por derecho propio, así como una enfermedad de puerta de entrada a otras enfermedades crónicas no transmisibles importantes, como la diabetes (80% de T2D) y 20% de cánceres. Además, acogemos con satisfacción esta oportunidad de empezar a trazar soluciones viables que puedan aprovecharse para la planificación a más largo plazo como parte del "Enfoque único de la salud".".